Dice un refrán
popular que «diciendo verdades se pierden amistades». Entonces, lo más fácil
-pensamos- es no decir nada, callar y no quedar mal y no ser así cuestionados.
De esta manera, la vida -que ya es bastante complicada- puede resultar más
plácida. Pero hoy las lecturas de la Palabra de Dios que acabamos de escuchar y
de proclamar nos dicen más bien lo contrario: que hace falta ser auténtico y
decir sí cuando es sí y no cuando es no. Es cierto que eso nos puede traer
complicaciones, como vemos en la primera lectura que le trajo al profeta
Jeremías, que fue perseguido, calumniado, y hasta exiliado por proclamar la
palabra de Dios. Y bueno... no digamos como le fue a Jesús por decir la verdad...
Él mismo en el evangelio ya avisa que la que le espera por decir la verdad es
gorda y, como, el decir la verdad e ir de cara en la vida nos puede gastar
alguna que otra mala pasada.

Vamos a pedirle,
pues, a la Virgen María, que nos ayude para ser verdaderos discípulos de
Jesucristo que caminan al encuentro con su Señor, aunque sea entre oposición y
renuncias; pero con la seguridad de que con nosotros va el Señor, que nos
prometió su presencia hasta el final de los tiempos.
Mn. Ramón Clavería Adiego;
Director espiritual de Canal Romero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Hola, bienvenid@ a Abril Romero. Deje su mensaje o saludo.