REPORTAJE: Celebración de la Candelaria 2018

Este fin de semana se celebraba la tradicional Fiesta de la Candelaria en la Basílica y Santuario de Sierra Morena.

Fotografía realizada y cedida por Manuel García

De este modo, los padres y madres han podido presentar ante “La Morenita” tanto a los niños pequeños que han sido bautizados en el último año en el Santuario, como aquellos que fueron bautizados en diversas parroquias de la provincia de Jaén y de todo el mundo católico. Por consiguiente, la patrona de la Diócesis de Jaén acogió por primera vez a los que serán devotos y romeros en futuros años.

Una celebración que transcurrió en tres jornadas.

La primera de ellas se llevó a cabo el viernes en el Colegio Virgen de la Cabeza, en la Ermita de Ollerías, y fue especialmente convocada para los bebés y niños de infantil que forman y formarán parte de la comunidad educativa del colegio.

Una de ellas, la segunda, que se celebraba el sábado, iba enfocada a las familias de los niños bautizados durante 2017 en la Basílica con una reunión de bienvenida en la sala de la hospedería para más tarde asistir a la misa presidida por el párroco y rector del Santuario, Domingo Conesa Fuentes. A la conclusión de la misma, se procedió a la mencionada presentación de los más pequeños ante la Virgen de la Cabeza, que fueron presentados ante la Morenita. 

La otra celebración transcurrió el domingo con la participación de la Cofradía Matriz que celebraba esta festividad mediante una Eucaristía con la participación del hermano mayor, Ramón Pérez Melero, así como de los miembros de la Junta Gestora. Tanto el rector de la Basílica y Santuario, Domingo Conesa, como el hermano mayor de la Cofradía Matriz, fueron los encargados de acercar a los bebés ante la imagen de la “Rosa de Oro”, en el camarín, regalando un estadal como recuerdo de este gran día para las familias devotas de la Virgen.

Todos estos actos los pudo relatar en directo y pueden verse en diferido, el Padre Trinitario Manuel García, que estuvo presente en todos los actos y narró desde la entrada de las banderas de la Cofradía Matriz hasta la propia entrada y la subida de los pequeños y pequeñas al camarín, donde pudieron besar a la Reina de Sierra Morena, la cual les arropará durante el resto de la vida, protegiéndoles bajo su bendito manto.

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